Amor y paz en tiempos de Toastmasters.
“Un líder lleva a la gente a donde nunca habrían ido solos”
- Hans Finzel
En los 60’s se hablaba de los hippies, de paz y amor, de renacer a una nueva cultura. Fue la juventud la que, tratando de romper con las estructuras, buscaron nuevos caminos para dejar al mundo en una mejor situación.
En esos movimientos sociales se veían; jóvenes que decidieron tomar acciones más radicales y se enfrentaron a las autoridades. Situación que se extendió por todo el planeta; Estados Unidos, París, México. Estos jóvenes que al escuchar las palabras de sus mayores dudaban de que fuera a haber algún tipo de reconciliación y que sus demandas fueran escuchadas.
Por otro lado, hubo otro grupo de jóvenes que buscaron aislarse en comunas que buscaban establecer un sistema de trabajo que fuera pertinente para que cada uno aportara ideas y lograran la autosuficiencia, tanto económica como alimentaria. A estos grupos se les denominó hippies. La definición más académica del diccionario Merrian Webster es;
"persona generalmente joven que usualmente rechaza las normas morales establecidas por la sociedad a favor de la vida en comunidad y promueve una ética de no violencia: usualmente se le refiere como una persona joven con el pelo largo y vestido en forma no convencional".
La vida de hippies también puede estar identificada con ciertos tipos de liderazgo. Líderes que teniendo una idea pudieron por un lado convencer a la acción violenta y otros que buscaron el camino del amor y paz.
En la actualidad los llamados milenials, creo que también mantienen en cierto grado ese espíritu de compartir. No necesariamente en una comuna, como en aquellos tiempos sino en un ambiente que la tecnología ha ampliado y llega a ser global.
En ámbitos que en la actualidad se denominan como co-working, comparten ideas, buscan financiamiento, trabajan en campañas sociales y empresariales sin la limitante de las fronteras.
Los hippies de hoy son tecchies, hípsters, nerds, gamers que con su computadora y una conexión a internet tienen contacto con personas de todo el mundo que igualmente andan buscando compartir, y finalmente aquí es donde se ve la necesidad de desarrollar habilidades de comunicación y liderazgo que permitan invitar y convencer a otros de que se involucren en sus proyectos.
Al igual que en todas las épocas, la juventud con más acercamiento a las novedades de la tecnología hace que surjan nuevas maneras de hacer negocios, y de poner a temblar a las costumbres arraigadas y los patrones de comportamiento.
Y quienes encabezan esos movimientos siempre son líderes que señalan no solo la necesidad de que haya un cambio sino, que son portavoces de grupos inconformes y que tienen una visión distinta de hacer las cosas.
En Toastmasters siempre hay ese deseo de tomar liderazgo y de querer hacer las cosas en forma distinta. Lo que vemos es ese deseo de que las actitudes cambien por medio de retos personales que te saquen de esa zona de confort que te mantiene trabajando y conviviendo en la rutina diaria. En ocasiones, solo cumpliendo las actividades que te impones en el rol que crees te corresponde y no tomas más riesgos.
Participar constantemente en un club Toastmasters, te permite estar alerta de que hay personas que necesitan un impulso para salir de una zona de confort y tomar riesgos que te obliguen a aplicar tus conocimientos y tus sentidos para presentar proyectos que impacten a un grupo y en ocasiones sin saber el alcance de tus palabras.
También, el trabajo de mentoría que permite el sistema de Toastmasters es igualmente un gimnasio que, si lo tomas, te hará responsable de algún miembro al que puedas ayudar, orientar y apoyar a lograr las metas que se ponga y sobre todo a romper los paradigmas de comportamiento que tenemos arraigados. Muchas veces solo necesitas una palmada o que te pongan retos para esforzarte en aspectos que cuentan trabajo.
Presencié recientemente un proyecto en el cual el orador presentó por segunda vez su discurso que requería mucho movimiento corporal, porque según le pareció a su evaluador que podría mejorarlo. El movimiento corporal es uno de los aspectos que a muchos nos han costado mucho trabajo desarrollar pues nuestra autoestima nos reprime de parecer que no tenemos control de nuestros movimientos y evitamos ponernos en evidencia ante la gente.
Al hacerlo en esta ocasión el orador terminó más contento del resultado por el trabajo y dedicación que le dio al proyecto. Pero, su evaluador aun así lo retó a llevar al extremo aquellas actitudes que le costaron trabajo.
Todo líder te llevará a situaciones que te fuercen a llevar al extremo tus miedos y con orientación puedas darte cuenta de que vas logrando aspectos que nunca creíste poder lograr. En un club no estarás solo, sino que siempre habrá alguien que solo le interesa que enfrentes y venzas tus miedos.
Los líderes de hoy no están en comunas, están en grupos sociales como Toastmasters donde compartimos conocimiento y experiencias, donde buscamos que nuestros prójimos puedan desarrollarse en un ambiente de amor y paz.
- Hans Finzel
En los 60’s se hablaba de los hippies, de paz y amor, de renacer a una nueva cultura. Fue la juventud la que, tratando de romper con las estructuras, buscaron nuevos caminos para dejar al mundo en una mejor situación.
En esos movimientos sociales se veían; jóvenes que decidieron tomar acciones más radicales y se enfrentaron a las autoridades. Situación que se extendió por todo el planeta; Estados Unidos, París, México. Estos jóvenes que al escuchar las palabras de sus mayores dudaban de que fuera a haber algún tipo de reconciliación y que sus demandas fueran escuchadas.
Por otro lado, hubo otro grupo de jóvenes que buscaron aislarse en comunas que buscaban establecer un sistema de trabajo que fuera pertinente para que cada uno aportara ideas y lograran la autosuficiencia, tanto económica como alimentaria. A estos grupos se les denominó hippies. La definición más académica del diccionario Merrian Webster es;
"persona generalmente joven que usualmente rechaza las normas morales establecidas por la sociedad a favor de la vida en comunidad y promueve una ética de no violencia: usualmente se le refiere como una persona joven con el pelo largo y vestido en forma no convencional".
La vida de hippies también puede estar identificada con ciertos tipos de liderazgo. Líderes que teniendo una idea pudieron por un lado convencer a la acción violenta y otros que buscaron el camino del amor y paz.
En la actualidad los llamados milenials, creo que también mantienen en cierto grado ese espíritu de compartir. No necesariamente en una comuna, como en aquellos tiempos sino en un ambiente que la tecnología ha ampliado y llega a ser global.
En ámbitos que en la actualidad se denominan como co-working, comparten ideas, buscan financiamiento, trabajan en campañas sociales y empresariales sin la limitante de las fronteras.
Los hippies de hoy son tecchies, hípsters, nerds, gamers que con su computadora y una conexión a internet tienen contacto con personas de todo el mundo que igualmente andan buscando compartir, y finalmente aquí es donde se ve la necesidad de desarrollar habilidades de comunicación y liderazgo que permitan invitar y convencer a otros de que se involucren en sus proyectos.
Al igual que en todas las épocas, la juventud con más acercamiento a las novedades de la tecnología hace que surjan nuevas maneras de hacer negocios, y de poner a temblar a las costumbres arraigadas y los patrones de comportamiento.
Y quienes encabezan esos movimientos siempre son líderes que señalan no solo la necesidad de que haya un cambio sino, que son portavoces de grupos inconformes y que tienen una visión distinta de hacer las cosas.
En Toastmasters siempre hay ese deseo de tomar liderazgo y de querer hacer las cosas en forma distinta. Lo que vemos es ese deseo de que las actitudes cambien por medio de retos personales que te saquen de esa zona de confort que te mantiene trabajando y conviviendo en la rutina diaria. En ocasiones, solo cumpliendo las actividades que te impones en el rol que crees te corresponde y no tomas más riesgos.
Participar constantemente en un club Toastmasters, te permite estar alerta de que hay personas que necesitan un impulso para salir de una zona de confort y tomar riesgos que te obliguen a aplicar tus conocimientos y tus sentidos para presentar proyectos que impacten a un grupo y en ocasiones sin saber el alcance de tus palabras.
También, el trabajo de mentoría que permite el sistema de Toastmasters es igualmente un gimnasio que, si lo tomas, te hará responsable de algún miembro al que puedas ayudar, orientar y apoyar a lograr las metas que se ponga y sobre todo a romper los paradigmas de comportamiento que tenemos arraigados. Muchas veces solo necesitas una palmada o que te pongan retos para esforzarte en aspectos que cuentan trabajo.
Presencié recientemente un proyecto en el cual el orador presentó por segunda vez su discurso que requería mucho movimiento corporal, porque según le pareció a su evaluador que podría mejorarlo. El movimiento corporal es uno de los aspectos que a muchos nos han costado mucho trabajo desarrollar pues nuestra autoestima nos reprime de parecer que no tenemos control de nuestros movimientos y evitamos ponernos en evidencia ante la gente.
Al hacerlo en esta ocasión el orador terminó más contento del resultado por el trabajo y dedicación que le dio al proyecto. Pero, su evaluador aun así lo retó a llevar al extremo aquellas actitudes que le costaron trabajo.
Todo líder te llevará a situaciones que te fuercen a llevar al extremo tus miedos y con orientación puedas darte cuenta de que vas logrando aspectos que nunca creíste poder lograr. En un club no estarás solo, sino que siempre habrá alguien que solo le interesa que enfrentes y venzas tus miedos.
Los líderes de hoy no están en comunas, están en grupos sociales como Toastmasters donde compartimos conocimiento y experiencias, donde buscamos que nuestros prójimos puedan desarrollarse en un ambiente de amor y paz.
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