Jitomates y hablar en público.

He encontrado que parte del miedo escénico que tenemos al hablar ante un público, es derivado a que la palabras no vienen a la mente en forma oportuna y solo quedamos pensando, “pero, si tengo la palabra en la punta de la lengua”. Nuestra mente trabaja como un músculo que al ejercitarlo nos responderá más rápidamente en las ocasiones en que se le exige. Y de la misma manera que a cualquier músculo debemos de ejercitarlo continuamente.

Habíamos hablado anteriormente de recursos retóricos de la gramática existentes que embellecerán lo expresado, pero al hablarlo no vienen así en el momento deseado.

Recientemente leí en un artículo de la revista Forbes que explicaba cómo mejorar la habilidad de preparar comunicaciones más exitosas de negocios. Y en lo que se fundamenta éste artículo es que todos, desde los poderosos hombres de negocios hasta el empleado recién contratado que está iniciando su carrera profesional y está haciendo sus prácticas, deben de poder escribir inteligentemente.

Expresémonos utilizando un lenguaje muy simple y claro, con lenguaje preciso y utilizando tantas otras reglas gramaticales básicas para escribir. Con esto podrás convertirte en un mejor comunicador y mejorarás la posibilidad de obtener más prospectos para el desarrollo y éxito de tu carrera.

Ser claro es una de las características de un buen negociador. En ocasiones al estar en una entrevista o negociación, utilizamos palabras muy rebuscadas con la finalidad de parecer más inteligentes o documentados en el tema. Pero finalmente la impresión que se llevan los escuchas es que estás tratando exageradamente de sonar muy culto y superior.

Si no tenemos la costumbre  de escribir en nuestra vida, sugiero una técnica que creo podremos utilizar sin mucho esfuerzo. Es la llamada Pomodoro o la técnica del jitomate. Está técnica se basa en trabajar en una actividad por un tiempo y con un contador de tiempo como los utilizados en la cocina (que en ocasiones parecen jitomates) que indicará el momento de descanso y posteriormente retomar la actividad. Tener momentos de trabajo intenso y momentos de descanso evitan que la mente se sature de tensión y ansiedad.

Eventualmente al seguir ésta técnica, desarrollaremos el hábito que hemos de aplicar en nuestras actividades diarias.

Actualmente hay diversos relojes pomodoro que puedes instalar en tu computadora o dispositivo móvil. No necesitas un reloj exclusivo pues muchas de estas aplicaciones existen en forma gratuita.